Especies Exóticas Invasoras

Conservación de especies y EEI

La introducción voluntaria o accidental de especies fuera de su área de distribución natural puede derivar en una invasión biológica con consecuencias desastrosas para nuestro medio natural. De hecho, las especies exóticas invasoras (EEI) están consideradas como las principales causantes directas de pérdida de diversidad biológica a nivel mundial.

La llegada de especies exóticas a nuevos territorios es preocupante, pues varias de ellas pueden llegar a convertirse en invasoras, causando daños a la biodiversidad, a los servicios ecosistémicos, a la economía y a la salud. De unas 12.000 especies exóticas presentes en la Unión Europea, entre un 10 y un 15% tienen comportamiento invasor.

Dos herramientas clave juegan un papel importante en la lucha contra las invasiones biológicas:

En nuestro territorio están presentes más de 50 especies exóticas con mayor o menor comportamiento invasor.

De ellas, 6 están incluidas en el Listado de especies preocupantes para la Unión Europea, y 16 aparecen en el Catálogo Español de EEI.

¿Qué son las especies exóticas invasoras?

  • Las especies exóticas invasoras son especies exóticas que se introducen o establecen en un ecosistema o hábitat natural o seminatural, y que es un agente de cambio y amenaza para la diversidad biológica nativa, ya sea por su comportamiento invasor, o por el riesgo de contaminación genética (definición del RD 630/2013).

  • El término alóctono, exótico o no nativo se refiere a especies que son introducidas fuera de su área de distribución natural y de su área potencial de dispersión, siendo esa introducción mediada por el ser humano, ya sea intencionalmente o accidentalmente.

Las invasiones biológicas son un fenómeno espacial...

No todas las especies exóticas que llegan a nuevos territorios se convierten en invasoras, de hecho muy pocas de ellas logran conseguirlo. Para que una especie exótica se convierta en invasora debe de pasar una serie de barreras. La primera es la BARRERA GEOGRÁFICA.

  • Ya sea intencional o accidentalmente, los seres humanos somos, en mayor o menor medida, los responsables de "cambiar a las especies de sitio". El comercio de especies, los medios de transporte, el movimiento de tierras, la construcción de grandes infraestructuras, etc., son algunos ejemplos de las vías de entrada de especies en nuevos territorios.

Una vez que una especie exótica ha superado esa barrera geográfica, se encuentra con otra, la BARRERA AMBIENTAL LOCAL.

  • Para llegar a convertirse en invasora debe superar esta barrera, estableciéndose en el medio natural y dispersándose por medio de diferentes vectores (agua, fauna, ser humano, etc.).

La última barrera a superar es la BARRERA REPRODUCTIVA. Esto implica que la especie exótica sea capaz de reproducirse en el medio natural donde ha sido introducida.

  • ​De todas las especies animales y vegetales que son introducidas, un número muy escaso se vuelve INVASOR, provocando efectos adversos sobre la biodiversidad y los ecosistemas nativos. Lamentablemente, los impactos provocados por estas pocas EEI son muy elevados, poniendo en jaque a especies, hábitats y ecosistemas nativos.

¿Por qué unas se convierten en invasoras y otras especies no?

Hay muchas características que comparten las EEI, que podríamos denominar "rasgos del buen invasor".

  • ​Adaptación climática y ajuste climático: que exista semejanza en el clima de la región de origen y de la región de introducción.

  • Capacidad de dispersión: punto clave para que la EEI pueda invadir nuevas áreas con gran rapidez.

  • Capacidad para aumentar su población: es decir, que se inicie temprano su época reproductiva, que carezca de competidores o depredadores naturales, que se pueda hibridar con especies nativas, que crezca con gran rapidez, etc.

  • Características propias de la especie: como que sea venenosa o tóxica, que sea parásito o portador de ellos, que sea una especie agresiva o territorial, etc.

  • Sinergias con otras especies: es decir, que la presencia de unas especies facilite el establecimiento de otras, amplificando el fenómeno de invasión.

Las características del hábitat también es son determinantes respecto a la susceptibilidad de ser invadido. Islas, climas templados sin inviernos rigurosos, zonas degradadas, climas húmedos, etc., son más susceptibles que otros a las invasiones biológicas.

¿Qué opciones existen para su gestión?

La gestión de las invasiones biológicas abarca varias líneas de actuación, que normalmente son complementarias entre sí.

  1. La PREVENCIÓN es la primera línea de defensa, es la opción medioambientalmente más deseable, y la económicamente más factible. Es fundamental en áreas donde no existe una determina EEI, en zonas sensibles o de alto riesgo....

  2. El CONTROL implica un esfuerzo generalmente continuado, que debe realizarse cuando la no es posible erradica a la especie invasora.

  3. La ERRADICACIÓN implica eliminar totalmente a la EEI. Es, después de la prevención, la mejor opción, pero en pocos casos es factible.

  4. La MITIGACIÓN, por su parte, implica compensar de una u otra manera los efectos negativos derivados de la presencia de una especie exótica invasora.

  5. La INVESTIGACIÓN también es necesaria en la gestión, de hecho es imprescindible para poder conseguir los objetivos planteados en un programa de gestión de una EEI concreta o de un grupo de ellas.

  6. La NO ACCIÓN es una opción cuando no se sabe cómo gestionar una especie en concreto, cuando se carece de presupuesto, o bien cuando las EEI tienen una baja prioridad respecto a otras más urgentes.

Conoce las EEI presentes en el territorio pinchando en los botones inferiores